La parroquia de Ayacucho está en problemas: faltan fieles. Otros cultos acrecientan su rebaño con un discurso más aggiornado, menos dogmático y con algunos incentivos… materiales.
Esto tiene preocupado al monseñor Betancourt, la autoridad mayor de la iglesia del pueblo, y lo devela no encontrar una solución. En las diarias partidas de ajedrez que entabla con el padre Cristian es el tema constante. Todas las parroquias de los pueblos adyacentes ya han sido superadas por las nuevas industrias de la fe y solamente un milagro podría salvar a la vieja (y querida?) iglesia de Ayacucho.
Josefina, joven ayudante de la iglesia y además sobrina de monseñor; Gerardo, el servicial capellán todo terreno y el cura Cristian, todos ponen en autos a monseñor de la posible salvación: Iris, la ponedora. En el prostíbulo del pueblo, manejado por Mónica Tiraboschi, sucede un acontecimiento que decenas de personas se acercan a presenciar: el prodigio del huevo milagroso, aquel que pone Iris, la hija de la dueña del burdel, la que se crió en un gallinero y ahora manifiesta ese portento. Eso dicen. Ergo: le proponen a monseñor un acercamiento, aceptar, es más: adoptar a Iris y sus huevos maravillosos. No es fácil la tarea: iglesias y prostíbulos son negocios de diversa índole pero idéntico fervor, fanatismos que se dice. La grieta.
Comedia desopilante, tan bien actuada como realizada. La escenografía de Esteban Siderakis y el vestuario están muy bien integrados a la narrativa. La puesta en escena de la mano de Ana Lucía Rodríguez, directora de la obra, es dinámica y creativa. El elenco en su conjunto compone un trabajo que logra una pícara empatía con el espectador. Interesante y disfrutable propuesta.
ELENCO: Martín Tecchi, Santiago Fraccarolli, Gastón Frías, Verónica Gonzales, Rocío Saldaña, Daniela Brunfman.
«La Ponedora». Funciones los viernes a las 22hs en SPORTIVO TEATRAL (Thames 1426, CABA)
Gustavo Oviedo para Es la Cuarta Pared
eslacuartapared.wordpress.com 